martes, 9 de enero de 2007

TONY SOTO


"- Es usted un idealista.
- No; se equivoca. Yo soy el pintor, no el idealista. ¿Sabe usted para quiénes pintan los artistas? Pintan para los héroes.
- ¿Incluso hoy?
- Incluso hoy. Hoy los artistas pintan para ellos mismos. Están aislados, así que se han convertido en sus propios héroes…"

De la novela “Un pintor de hoy” de John Berger

 La vida te da sorpresas y zarpazos; pero normalmente te mueves en la espesura de lo cotidiano, entretenido con tus preocupaciones y el consumo de distracción normalizada. Se puede ascender sobre todo lo que te lastra y desarrollar una de las facultades humanas más preciadas: la creatividad. Si tú, que lees estas líneas o ves esta exposición, has conseguido algo de tu inteligencia creadora en cualquier faceta, sabrás que ni es gratuito ni tiene apenas reconocimiento. La recompensa está en el propio proceso, en la intimidad del estudio. La fama es para los idolillos de papel.
  Tony Soto pertenece a la categoría de heroína; porque si un artista plástico puede llegar a serlo con ciertas dificultades, una pintora lo tiene aún más difícil. Además, no ejerce el oficio como algunos esperan, no hay sentimentalismos tópicos de lo que se supone arte femenino: sus planos limpios, los ángulos cortados con precisión, la racionalidad de la geometría… invitan a la reflexión.  El pensamiento es sentido y equilibrado por el color: vitalista y entusiasta.   
  Para mi ha sido una grata sorpresa ver sus últimos trabajos. Ha alcanzado la categoría de obra maestra en muchos de sus cuadros (independientemente de lo que digan o ignoren los críticos profesionales).
  Está aquí, en nuestra Sala TRÍPTICO. Todo un lujo. Podemos participar del goce de sus logros.
Picar aquí para ver imágenes de la inauguración